Liderazgo
¿Trabaja cubriendo su parte trasera?
¡Hola!
¿Le ha pasado que le preguntan cómo le va en el trabajo y usted responde que “pura vida” no siendo cierto al 100%? Es posible que estemos pasando mucho tiempo preocupados, cubriéndonos el trasero por miedo a nuestros jefes o compañeros.
Si pensamos sobre nuestros años laborales de seguro nos hemos sentido aburridos, “ahuevados” y hasta hartos en algún momento. No se ventila a viva voz, pero nos ha sucedido.
Pocos son afortunados de disfrutar al 100% en su empleo. Si no somos parte de ese grupo lo justificamos con razonamientos para engañarnos y parecer lo que no somos. No lo juzgo porque a mí también me ha pasado.
Cifras que espantan
Es un hecho casi que de catástrofe. El 85% de los empleados en el planeta se sienten desmotivados y sin compromiso.
La encuesta de Gallup sobre el Estado del Trabajo Global 2017 arroja cifras escalofriantes. El 18% del personal está altamente demotivado. Un 67% no está comprometido y muy bajo de motivación. Solamente el 15% está comprometido y motivado.
La insatisfacción es efecto de una mala cultura y falta de liderazgo. Los buenos colaboradores no abandonan empresas. Dejan superiores imbéciles que no les aportan y que, por el contrario, les roban sus energías y voluntades. Estos jefes hacen que disminuyan la productividad y la rentabilidad.
Conozcamos el “Círculo de seguridad”
Un error de líderes organizacionales es fallar en el desarrollo de lo que Simon Sinek llama el “Círculo de seguridad” interno, que permite un ambiente y relaciones que generen confianza.
Todos luchamos diariamente contra una serie de “peligros” que atentan contra nuestros esfuerzos y bienestar. Lo normal es que el peligro venga de afuera, de las fuerzas competitivas que moldean la industria donde desarrollamos el negocio. Sin embargo, si hay peligros latentes dentro de organización, se jodió la cosa.
Ese estado de preocupación por la competencia interna, el chisme, las derrotas y el qué dirán nos genera el comportamiento conocido como “andarse cubriendo la parte trasera”.
La ausencia de confianza entre los miembros del equipo nos desenfoca de lo importante y también nos hace “peores personas”. Andamos viendo fantasmas donde tal vez, solo tal vez, no los hay. Es por esto que preferimos cubrirnos el trasero primero antes de dar algún paso.
Las presiones del entorno sobre el actuar empresarial son una constante. Por el contrario, los peligros dentro de la misma empresa son una variable que se debe administrar.
El liderazgo brinda seguridad
Un verdadero liderazgo tiene que proveer un sentimiento de confianza total dentro del equipo, para que las personas puedan sentirse protegidas.
Altos niveles de confianza fomentan la cooperación, la empatía, el trabajo en equipo y la resolución de problemas. Este círculo de seguridad virtuoso se alimenta, genera y consolida la confianza.
“El liderazgo genuinamente humano protege a una organización de las rivalidades internas que pueden destruir una cultura. Cuando hemos de protegernos los unos de los otros, se resiente toda la organización. Pero cuando la confianza y la colaboración florecen en el seno empresarial, avanzamos juntos y, como resultado, la organización se fortalece”, dice Simon Sinek en “Los líderes comen al final”.
Desarrollemos un ambiente seguro. Si las personas se sienten seguras darán la vida por los otros, ya que tienen la seguridad de que eso es lo que los demás harán también.
Abrazo afectuoso desde el círculo,
Rodolfo Cruz Naranjo